Stanley Kubrick (1971)
Esa sensación de cuando ves una película que ya ha visto todo el mundo y está súper integrada en el imaginario colectivo. Pese a ser mi primera vez, en casi cada escena había cierta familiaridad, así que ha sido un visionado un poco raro.
Los disfraces, la música, las performance… lo conocía todo salvo la trama, que está curiosa pero tampoco me ha dado más. Creo que es la típica película para ver de adolescente cuando estás descubriendo el cine, seguro que ahí impacta mucho más.
Toda la primera parte me ha parecido un poco rollo, con los crímenes sobreactuados, la música clásica y las conversaciones teatralizadas. A partir de la cárcel me ha gustado más, sobre todo cuando veía que llegaba el momento de la técnica Ludovico. Same vibes de cuando ves Star Wars esperando el momento “Yo soy tu padre”.
No se hasta que punto es viable una “terapia” así o si se ha probado algo parecido, pero para mi ya es una auténtica pesadilla que te sujeten los párpados para que no puedas pestañear mientras te echan colirio, ya no te digo si le sumas películas traumáticas mientras tanto.
Seguro que se pueden hacer reflexiones interesantes y análisis profundos de muchos de los temas que trata (violencia, sexo, sistema penitenciario, etc.), pero yo no lo he hecho. Me he quedado en la novena de Beethoven y las palabras inventadas que utilizan.
No sé si voy a ser capaz de encontrar las palabras para describir lo profundamente mojón que me ha parecido esta película.
Soy de esas pocas personas que no la había visto nunca, ni siquiera cuando en la adolescencia, da igual cuando hayas nacido, de repente llega un momento en que se convierte en la película de culto que hay que ver, presumir de que te encanta, y disfrazarte con calzoncillos blancos por fuera y tirantes. Esto me ha generado mucha inquietud, es como disfrazarse de la manada. En serio, horror.
Me ha parecido una película muy desagradable en general. A pesar de no ser nada explícita (bueno, siempre vemos bien de tetas y vulvas, eso que nunca falte en una película de señoro), me ha dado muchísimo más asco que cualquiera película donde haya visto tripas, cerebros esparcidos por el suelo o litros y litros de sangre.
Sé que todo hay que verlo en el contexto y blablabla. Muy bien, aún así, me parece una película ultra testosterónica (tetas, violencia, un pedo jaja, jovencitas lamiendo helados fálicos…), y que tenga tan buena puntuación en letterboxd me da miedo. Estamos en los 70 sí, pero que esto es una película de un grupo de violadores y no se menciona la palabra violación en ningún momento. Me asusta pensar que esta película siga gustando hoy en día a alguien, y mucho más a adolescentes.
Pero es que además, me ha resultado terriblemente aburrida, eterna. A ratos me parecía una (muy) mala imitación de los Monty Pithon, a ratos una película de Pajares y Esteso.
Añadida a la lista de peores películas que he visto en mi vida.
Le casco un cerapio como una casa.
La Naranja Mecánica tiene ya más de 50 años y viene de la adaptación del libro homónimo de Anthony Burgess. La mayoría de películas de Kubrick están basadas en libros. Rodada en el 71, la acción discurre en un mundo distópico de los 90 y esto hace que ahora la forma de interpretarla sea completamente distinta. Aun así, son muchos los esfuerzos por hacer de ella una obra atemporal. Utiliza una jerga propia, una estética original y un diseño innovador para la época. Su carga de violencia, fetiches y desnudos hizo de ella un verdadero escándalo en su estreno.
Es precisamente toda esa estética y teatralidad la que me sigue interesando. Salvando ciertas interpretaciones que me parecen bastante ridículas. Es en la exposición de los temas, en lo que me parece demasiado burdo. La sutilidad brilla por su ausencia cuando intenta hacernos creer que un psicópata en un teatro no es capaz de contener su ira o sus ganas de violar a una chica porque se le vean las tetas. O la escena ya “recuperado” de las tiras de comic. Se supone que estamos hablando de un psicópata, pero no con la mentalidad de un niño de 3 años.
Las herramientas para dirigir e influir en la opinión pública son cada vez más sofisticadas y baratas. Los algoritmos y IAs permiten una manipulación cada vez más personalizada y eficiente. En cuanto a las terapias médicas para inhibir aspectos psicológicos no parece algo que se haya explotado, pero a cambio ya van apareciendo técnicas para modificar genéticamente aspectos físicos y enfermedades antes del nacimiento, no parece probable que la cosa vaya a quedar en eso.
Había visto La Naranja Mecánica hace muchos años, y guardaba un recuerdo mucho mejor del que he tenido con este visionado. No sé si es el paso de los años (para mí y para ella) pero me ha parecido una película vacía, sin un mínimo de crítica y con mucho metraje en el que no sé realmente qué es lo que me quiere contar. ¿Son acaso los drugos el sistema?, ¿son los antisistema?, ¿es la violencia el único medio que entiende la película para conseguir un fin?
Las décadas han envejecido fatal una película que en su día fue una transgresión total (aún recuerdo a mi padre hablándome con vehemencia de ella) pero ahora no queda más que como una extraña cinta de más de dos horas con conversaciones poco fluidas donde solo se salvan algunos planos, la estética y el uso de la música de Kubrick.
Supongo que, como hemos llegado a ese posible futuro y la realidad no es como la pintaron, es difícil encontrar el impacto que otros si tuvieron al verla en los setenta.
Una pena.