Ruben Fleischer (2009)
Sabía que estos días no iba a tener mucho tiempo libre así que busque en google las “películas más cortas” y en un artículo de películas buenas de menos de hora y media aparecía Zombieland. Que gran oportunidad para volver a verla, creo que por tercera vez.
Lo cierto es que es justo lo que se espera de ella. Amena, entretenida y con un grupo de personajes (nunca mejor dicho) carismático y divertido. Y el puto Bill Murray.
Supongo que en su día no serían más que actores prometedores, pero Emma Stone y Jesse Eisenberg como protagonistas es un puntazo. Y Woody Harrelson como tarado entrañable completa un gran cast.
Yo creo que es la típica película para ver fumado. Yo como no soy nada de eso, la disfruto con mis palomitas y tan ricamente. Incluso esperé con ilusión la segunda parte y fui a verla al cine, y creo recordar que también salí bastante satisfecho. Igual cae también en el club del cine.
Teníais razón, es bastante divertida. El género del cine zombi me suele dar muchísima pereza porque no logro entender cómo se ha conseguido firmar un contrato social en el que todos entendemos qué es un zombie, de qué se alimenta, cómo se mueve y cuáles son sus limitaciones. No sé si existe un manual del zombi, desde luego yo no lo he revisado pero se ve que el resto de la humanidad sí.
En cualquier caso, una vez aceptadas las implicaciones de un mundo zombi, he entrado de lleno. Está bien jugado eso de las normas y cómo se van repitiendo (double tap la mejor), no se hacen cansadas y siempre rematan el chiste. Los personajes tienen cierta gracia porque logran que cuatro personas diferentes encajen bien entre ellas. Eso sí, Jesse Eisenberg una vez más hace de sí mismo y su personaje es mazo de incel. Mi teoría es que nunca ha actuado y aún así ha llegado bastante lejos. En general creo que incluso para ser del 2009 Zombieland tiene demasiados tintes viejunos, incluído ese maquillaje de Emma Stone. Pero bueno, no juzgaremos esta película con gafas moradas, que no es plan.
Si me ha gustado es porque ha sabido darme en mis talones de aquiles, en plural: los parques de atracciones y las mansiones de famosos. Dos cosas que me flipan siempre. Lo del parque de atracciones nocturno con luces de colores está bien grabado y toda la parte de Bill Murray es bastante buena. Me gusta que usen a alguien de ese caché para unos pocos minutos y que encima muera por imbécil. No me gusta mucho Bill Murray pero reconozco que sabe reírse de sí mismo.
PD: por si teníais la misma duda que yo, Fundéu dice que en español el singular se escribe zombi (la/el) y el plural zombis.
Si alguien me pregunta, en cualquier situación de la vida, y sin tener en cuenta ningún baremo más que el entretenimiento, que qué película puede ver para pasar un buen rato, en mi mente aparecerán dos opciones: Supersalidos y, evidentemente, Zombieland.
¿Tiene algo que ver que en mi mente Jesse Eisenberg y Michael Cera siguen siendo la misma persona? Es muy posible.
Los créditos iniciales de Zombieland son, hablando en serio, parte de la historia del cine. ¿Cómo se puede hacer algo tan molón? Cada vez que veo esta película tengo que fijarme en mil detalles de esos primeros minutos, una pasada total.
A partir de ahí, el argumento no deja lugar a dudas: hay un apocalipsis zombie y nuestro prota era el típico pringao de instituto que por alguna razón sobrevive. ¿La razón? Es más listo que el resto porque sabe sus debilidades.
Emma Stone y una pequeñísima Abigail Breslin están increíbles pero, ¿lo de Woody Harrelson? Imagino que cuando recibió el guión dijo: pienso salirme y hacer icónicos los twinkies. Y bueno, el cameo sorpresa está a un nivel estelar, a la altura del actorazo.
No se le puede pedir mucho más a una comedia de zombies de lo que yo le pido a Zombieland. Y sí, probablemente no se estudie en las academias de cine, pero es una verdadera lástima.