Fantastic Mr. Fox

Wes Anderson (2009)

 

Sabias que…Los trajes de pana y lana que lleva Mr. Fox estaban basados en la propia indumentaria de Anderson, a través de unas muestras de tela de su sastre para poder ajustar el color.

En Fantastic Mr. Fox podemos encontrar el bendito sello de Wes Anderson, para aquellos que nos deja siempre fascinados. A pesar de ser una de las mas valoradas era la primera vez que la veía y poco después de disfrutar de su hermana pequeña en slow motion Isla de Perros.

Imposible no disfrutar de esta preciosa animación, con una variedad ingente de detalles en cada escena, para compensar eliminamos los tonos verdes y dejamos la gama Anderson patente, los personajes también llevan su toque extravagante y se van formando y desarrollando de manera inteligente y brillante, en especial me gusta el hijo. El ritmo trepidante, los dialogo rápidos, juegos de palabras y humor que destila ayudan a hacer de ella una película que nunca llega a decaer y que termina antes de que te quieras dar cuenta. Uno de los puntos en los que también es sobresaliente es en la elección de canciones y en su bso original.

La historia esta basada en un cuento de Roald Dahl publicado en 1970. Como tal, es un buen ejemplo de película que se disfruta tanto en niños por su simplicidad, colorido y dinamismo, como para adultos con un dialogo inteligente y un mensaje directo. Si bien es verdad que hay algunos giros muy simplistas que dan la sensación de relleno.

No estamos ante la mejor de las películas pero si ante una muy adorable.

Lo mejor: el fastuoso trabajo de arte.

Lo peor: la historia no cala demasiado.

Wes Anderson no es santo de mi devoción por lo que casi fue un reto para mí el visionado de esta película. De lo poco que he visto de él saco como conclusión que su cine deambula entre la chorrada de lo naíf y la belleza de la genialidad.

Fantastic Mr. Fox es una maravilla de stopmotion –aunque por ahí he leído que también está realizada con claymotion– en la que lo importante es el resultado final con una historia atractiva, unos personajes acertados y bien construidos. La “artesanalidad” de la cinta juega muchos puntos a su favor así como la originalidad, por ejemplo, de la presentación de los tres malvados granjeros. Mención aparte merece la fantástica banda sonora de Alexandre Desplat.

Pese a todo esto, bajo mi punto de vista, flaquea conforme avanza la película y no creo que la llegue a recordar pasado un tiempo. Me quedo con su belleza superficial -¡oh poderosa simetría!- que, lamentablemente, carece de un contenido digno. No puedo dejar de compararla, aunque no se debe hacer, con los trabajos de animación de Tim Burton y, claro, se me derrumba.

Ah, para acabar diré que no entiendo muy bien el valor ético o moral de la película. Quiero decir, Mr. Fox es un zorro buenísimo y astuto (y chulo, déspota, arrogante, altivo…) que quiere acabar con los malvados granjeros pero ¿Mr. Fox no es de la misma calaña que ellos? Pregunto.

Wes Anderson deja de esnifar las plastidecor que utilizas para estas películas.

Una de las mayores virtudes que puede tener un cineasta es la de poseer un estilo claramente marcado, que consiga plasmar de forma natural una visión única y personal del mundo y del arte. En este caso, hablamos de uno de esos directores de los cuales solamente es necesario presenciar un fotograma de alguna de sus películas para reconocer que nos encontramos dentro de su universo. Y eso es, como Mr. Fox, Fantástico.

Las películas de Wes Anderson son tan inconfundibles como difíciles de definir o ubicar, puesto que no abundan precisamente las referencias a otra cosa remotamente parecida que podamos haber visto anteriormente. En este sentido, se le puede encuadrar dentro del cine indie americano, pero desmarcándose como absolutamente distinto y singular dentro del género.

Su personalidad artística es tan única y tan grande, que también ha conseguido trasladar su peculiar estilo al mundo de la animación. Así, Fantastic Mr. Fox, como sus películas de carne y hueso, tiene asimismo un comienzo abrumador, repleto de planos exuberantes que contienen mil y un detalles, a los que acompaña un ritmo trepidante que casi no permite apreciarlos. Todo es una coreografía perfectamente orquestada, plagada de orden, meticulosidad y hasta cierta obsesión maniática. Sí, Wes Anderson es el mejor representante cinematográfico de las personas con TOC.

Igualmente, la película continúa delatando el marcado anacronismo de Wes Anderson, no sólo por la construcción de sus personajes y el universo en el que habitan (un pasado indeterminado y no vivido por el que siempre parece sentir una enorme nostalgia), sino también por la elección, en plena era de animación digital, de la técnica del stop motion, lo que le sigue configurando como un artista radicalmente fuera de su tiempo.

El único problema de sus películas, en mi opinión, es que casi siempre van de más a menos. Todo lo que al principio es abundancia, fascinación y genialidad termina sucumbiendo en algo más pesado y artificial, que va muy poco a poco perdiendo fuerza y algo de sorpresa. Por eso, me interesa mucho más la introducción en ese mundo imaginario, casi onírico pero plagado de referencias a la realidad, que el posterior desarrollo de la historia. Wes Anderson dota a cada escena de un tremendo cariño hacia sus personajes y su hábitat, hacia su idiosincrasia y sus peculiaridades, en ese caso estableciendo una curiosísima conjunción de los comportamientos animales y humanos. El protagonista, Mr. Fox, es un fiel reflejo de muchas de sus preocupaciones en cuanto a la tipología de personajes: sobrio y muy sujeto en su actitud moral, pero a la vez aquejado de una crisis de identidad; proactivo y meticuloso en la resolución de problemas, con mucho carisma (amén de la maravillosa voz de George Clooney) y un toque de extravagancia inconfundible; e, igualmente, y lo que se convierte en uno de los temas principales de la película, siempre dispuesto a tomar el camino más arriesgado pero también el más personal, divertido y disfrutable.

Me gustan las películas que están divididas en actos. Pelis para no perderse. Pelis para dummies. Y como eso me ha gustado, voy a escribir la crítica por apartados también. Pero sin simetrías. VA POR TI, WES.

  • APARTADO TÉCNICO

Lo más guay de todo. Me gusta el stop motion que utiliza. Los personajes moviéndose a trompicones, las expresiones en sus caras (esos ojos y dientes), los efectos atmosféricos y otros elementos como el agua y el fuego, etc. Todo muy curioso y que me produce una mezcla al verlo entre incomodidad y placer que acabo disfrutando.

El apartado sonoro tampoco se queda atrás, desde las canciones míticas que van sonando, hasta las voces de los animales (enorme George Clooney), pasando por todos los efectos sonoros que van acompañando la acción.

  • PERSONAJES

Si no fueran zorros que hablan creo firmemente que sería todo bastante aburrido y típico, personajes incluidos. Pero bueno, hace gracia ver a animales comportarse como señores, aunque de vez en cuando tengan unos arranques filosóficos un poco extraños.

Por lo demás son los típicos personajes estereotípicos: el padre gruñon, la madre sumisa y el hijo incomprendido.

  • HISTORIA

Seamos honestos: la trama no tiene ni pies ni cabeza. ¿Unos zorros destruyendo un pueblo humano con piñas en llamas? Obviamente a estas alturas no vamos a penalizar a la película por esto, ya ha quedado claro que no trata de ser realista en nada de lo que hace, pero un poco más de coherencia con el mundo real hubiera estado bien. Disfruté mucho más de la primera parte en la que los zorros viven su vida de zorros que de la guerra con los humanos. Pero bueno, no se trata de juzgar lo que me hubiera gustado que fuera sino lo que es, y en general me ha parecido entretenida y curiosa.

Las tramas de los personajes pues la de siempre. Mr. Fox acaba siendo el heroe que siempre quiso, acaba reconciliándose con su hijo y Felicity acaba perdonándole porque sí, porque todo salió bien y vivieron felices y comieron perdices. Happy ending. The end. Next.

  • WES ANDERSON

El día que descubrí su obsesión por la simetría en los planos me arruinó todas sus películas. Ahora solo puedo fijarme en eso y en lo enfermizo que llega a ser este recurso, aunque debo reconocer que me gusta su estética con tantos colores saturados

  • TEST DE BECHDEL

Mucha innovación en la forma pero el fondo sigue siendo el mismo, querido Wes. Suspenso.

Preciosa puesta en escena de una animación radiante y genial, con una entrañable y ocurrente historia que cuadra a la perfección con un ambiente muy bien conseguido condimentado con una inesperada banda sonora. Fantastic Mr. Fox aparece como una bonita, ligera y afable alegoría sobre la constante lucha entre el ser humano y el mundo animal, donde la sátira del salvajismo humano se combate de una manera aguda y simpática por una congregación de animales salvajes, donde el compañerismo y la solidaridad se erigen como principal némesis de la crueldad humana.

Historia hecha para nuestra parte más entrañable y nostálgica evocando a la infancia con una animación perfecta y brillante donde la llamativamente deslumbrante ambientación hace que este ágil largometraje pase como una experiencia muy recomendable.

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