Mary and Max

Adam Elliot (2009)

 

Lo primero que hago cuando veo que una película empieza diciendo que esta basada en hechos reales es ir inevitablemente a comprobarlo, ya os adelanto que no que esta inspirada en la relación que Adam Elliot compartió con un estadounidense vía correspondencia durante 20 años pero todo lo demás es ficticio. Este dato esta lejos de defraudarme pues el film sigue teniendo todos los ingredientes que necesito para ponerme las botas.

Es una historia magnifica, que empieza de la mejor forma posible, con unas presentaciones grandiosas. Y es que no hay nada que me guste mas que este tipo de descripciones y enumeraciones rutinarias a la hora de dar a conocer a los protagonistas; mi debilidad. La conexión que se produce entre estas dos almas solitarias es absolutamente conmovedora y el humor negro que se desprende de la inocencia e ingenuidad de los dos es sin duda el pilar de la película. No hay apenas consuelo en ningún momento, los golpes en sus vidas cada vez son mas fuertes y te ves casi cruzando los dedos porque algo bueno pueda realmente recompensar a estos dos incomprendidos. Es una película oscura y directa pero a la vez tierna y conmovedora, de las que deja poso.

Y a todo eso ademas hay que añadirle el nivel de detalle del modelado y la escenografía, un trabajo enorme que les llevo 5 años y un costo de 8 millones de dolares. El nivel de detalle es impresionante y hay que verla varias veces para poder reparar en todo.

Con todo ello, revisando lo que he visto de aquel año 2009 me ha sorprendido que estando entre mis favoritas competía con otras de nivel en animación como “fantastic Mr. Fox” y “Up”. De ese año me ha gustado recordar “Ciudad de vida y muerte”, película que recomendó Guillermo allá por los tiempos en los que sin web quedábamos una vez por semana para sentarnos y charlar a menudo de todo menos de la peli.

¿que por qué Mery and Max?

Porque me encantan las pelis de animación Stop Motion y mucho mas si hacen gala de humor negro y un punto retorcido que en contraste con la inocencia de la plastilina le da un toque sublime.

A mí lo del stop-motion me flipa. Es otro nivel. Es arte. Sí, todo el cine es arte pero esto es arte al cuadrado ¿Me explico?


Mary and Max explota la estética y las posibilidades técnicas que tiene en su poder el stop-motion. Tiene un guión perfecto que refuerza el mensaje que pretende transmitir. La mayoría de la historia avanza con las cartas que se envían nuestros protagonistas y, aunque no es un recursos super novedoso, a mí me gusta. Además gracias a dichas conversaciones, graciosas en algún caso, nos permiten ser conscientes de su visión del mundo. Empatía is calling.


El tono lúgubre y oscuro que induce al suicidio es comprensible y está estratégicamente utilizado (creo yo). Por favor, mirad las vidas de Mary y Max si es que no hay alegría por ningún lado.


Otro punto a favor es la atención prestada al detalle como, por ejemplo, al principio de la película cuando nos muestran el vecindario donde vive Mary. Hecho que también contribuye a la narrativa.


Llegando al apartado negativo y no me gusta usar este adjetivo para una película, diré que puede parecer lenta. Alto. Espera. Es lenta, sí pero creo que tampoco puede hacerse de otra manera. Sus dos protagonistas de dan a conocer en profundidad y es un hecho clave para que entendamos cómo son y cómo se comportan.


Sin duda será una de las películas «de animación» que recomendaré en un futuro muy cercano.

¿No ha llegado un punto en el que estas películas de animación stop-motion, intentando alejarse del estereotipo de película infantil, se han vuelto especialmente intensas? Es como si para compensar la estética, tuvieran que mostrar los mayores dramas posibles. No sé, igual es cosa mía porque realmente solo veo este género cuando a Jorge G le da por recomendarlo.

Lo que más me ha flipado es que esté basado en una historia real. No sé hasta que punto será esto verdad, porque he tratado de investigar y no he encontrado nada muy concluyente. Espero que Jorge nos aclare esta duda, que para algo es su propuesta.

Anyway, la historia de Mary y Max me parece asombrosa porque es de otro tiempo. Hoy en día es inimaginable una relación así entre dos personas, unicamente por correspondencia. Al margen de si es real o no, me ha parecido creíble la evolución de ambos personajes y la relación entre ellos, apoyándose el uno en el otro cuando en su día a día no tienen a nadie más.

Especialmente duras me han parecido las partes de Max, con continuos ataques de ansiedad provocadas por las inocentes preguntas de Mary y su propia incapacidad para gestionarlas. Tiene que ser muy jodido tener Asperger a esos niveles (supongo que habrá niveles) y encima no tener a nadie que te ayude en tu día a día. Qué pena la vida de Max, totalmente solo y aislado y sin capacidad para solucionarlo. Incluso sus propios psicólogos no le entienden.

El colmo es que para un momento bueno que iba a tener, que era conocer a Mary, se muere horas antes. Esto no puede ser una historia real, too much drama.

Tampoco me puedo creer que en la realidad haya una persona tan BUENA que una vez escrito su libro decida no editarlo y cancelar su publicación por la reacción de Max. Y si es real, pues me quito el sombrero, aun creeré en la humanidad.

Dicho esto, la película se me ha hecho demasiado pesada. Es muy lenta, lentísima. Y encima está plagada de tonos oscuros y sin vida. Durísimo a no ser que estés muy mentalizado. Lo peor de todo es que el inicio parecía mucho más prometedor, con una música “cañera” y unos coloridos primeros planos del vecindario de Mary que me animaron a seguir viéndola. Pero fue un espejismo.

La verdad es que he visto muy pocas películas que sean de animación, stop motion o muñequitos en general. Hace unas semanas me propuse ver alguna más y este ha sido un gran inicio. Gracias, Jorge, por recomendarla, me ha parecido una joya.

No me esperaba mucho de ella, pero me ha atrapado desde la primera escena. Están muy conseguidos los entornos sepia australiano y gris neoyorkino, que junto a la banda sonora hacen que te sitúes bien dentro de la historia. Y qué historia. El guion es superingenioso y casi perfecto. Ha conseguido que me ría unas cuantas veces y además que acabe llorando. Me he empezado a apuntar algunas frases al principio pero luego he tenido que dejar de hacerlo, que la lista empezaba a ser muy larga. Por mencionar una, elijo la sensación de que se te quede la vida asimétrica con circunstancias como la muerte de un pez, junto a la necesidad de reponerla y devolverle la simetría. Quiero creer que no solo yo, sino que todos empatizamos con estos dos personajes.

Mary & Max está hecha con mucho cariño y cuidado. En pocas películas se describen tan bien los sentimientos. Las palabras son suficientes aquí, pero los muñecos logran acompañarlas. Se trata el tema de los desórdenes mentales con tanto respeto que ha conseguido emocionarme en varios momentos, que por otra parte, tampoco es muy meritorio.

Lo mejor:

  • Su humor negro.

  • Que alguien trabaje en la fábrica de hilos que unen las bolsas de té con el papel.

  • La amistad, joder, qué bonito es tener amigos y qué difícil es no tenerlos.

  • Las casualidades.

Lo peor: sigo sin saber distinguir si una peli de muñequitos es apta para niños.

A %d blogueros les gusta esto: